Temblad Malditos!!!

CRÓNICA DE UN ASESINATO

Discutieron como nunca lo habían hecho:Gritos,patadas,reproches... A él le poseía la cólera, a ella la histeria y la impotencia. Viendo que aquello no llevaba a nada Aída puso el punto de inflexión. Entre lágrimas se arrodilló y pidió a Alfredo que la perdonara... Él, cansado del numerito, la miró con resignación y dió la vuelta marchándose del cuarto...

En ese momento Aída se cambió la máscara; de gatita a leona, de víctima a verdugo. La llama del odio prendió sus ojos. Demasiado rencor acumulado, demasiado tiempo soportando aquella situación que la mataba en vida...
Movida por un impulso súbito se incorporó, cogió el abridor de cartas que había sobre la mesa del despacho y como una energúmena se avalanzó sobre él, traspasándole el alma con su último regalo de cumpleaños una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez... Así hasta 24 veces, las dos últimas a la altura del esternocleidomastoideo, asegurándose así que no sólo anulaba su alma, si no también su mente.

Alfredo cayó al suelo, la moqueta del despacho comenzó a teñirse de rojo... Aída contempló su cuerpo exangüe durante unos segundos con el rostro petrificado,serio, intacto,hasta que su boca dibujó una leve y victoriosa sonrisa...

Lanzó sobre el cuerpo de su marido el abridor de cartas y exclamó altiva:

- ¡ Atrévete a quitarme ahora la VISA, hijo de puta...!